Saltar al contenido

Como dejar de ser un neurótico

ÍNDICE:

-Artículo 1: «COMO DEJAR DE SER UN NEURÓTICO»

-Artículo 2: «LAS 25 PREGUNTAS PARA MEDIR TU CAPACIDAD DE ELEGIR TU PROPIA    FELICIDAD»

ARTICULO 1:

COMO DEJAR DE SER UN NEURÓTICO

Como dijo Freud todos somos «neuróticos», es decir todos tenemos  algún grado de incapacidad para que nos dure mucho la felicidad, alguna forma de incapacidad para disfrutar plenamente de las maravillas que el hecho de estar vivos nos ofrece. Nos hemos hecho especialistas en estar siempre preocupados o preocupadísimos por algo hasta el punto que, si un día estas tranquilo y relajado, parece que te falta algo o que estás haciendo algo malo. Somos expertos en complicarnos la vida y, algunos más que otros, también en maltratar su cuerpo con excesos de comida, bebida u otras sustancias.

He aquí algunas directrices para tratar de salir de aquí:

Sea lo que sea lo que haya que hacer, has de hacerlo tú sólo. Te pueden ayudar determinadas personas, actividades, conocimientos, incluso medicamentos, pero eso, ayudar,  el resto has de ponerlo tú si quieres lograr un cambio definitivo y estable para mejor. Muchosde nuestros procesos mentales así como muchos de nuestros actos se han convertido en HÁBITOS por repetición y por ello la tarea de poner voluntad en repetir algo distinto hasta que acabe siendo un hábito más productivo que sustituya al anterior, es algo que nadie puede hacer por ti. Y los cambios aunque alguna vez «caen del cielo» es mucho más probable conseguirlo actuando tu, que esperando una solución externa a ti. Evidentemente necesitarás un motivo y ganas antes de nada.

Has de hacerte responsable de ti mismo completamente. Ser consciente de que eres el único responsable de tus actos, de tus pensamientos, de tus éxitos y de tus fracasos. Proponerte que se acabó echar la culpa de tus problemas a la sociedad, a tu jefe, a tu infancia, a la educación, a tus amigos, pareja, familia, al destino, a tu mala salud, etc. No. Trata de ser lo suficientemente valiente para dejar de acusar a los demás, dejar de enfocarte en causas que están fuera de ti y de tu control y trata de empezar a entender que tú eres el que ejecuta tus acciones y por ello eres el responsable de sus consecuencias. Para empezar a coger las riendas de tu vida reconoce que eres el que decide que palabras dices y el responsable de sus efectos, el que decide que hacer o dejar de hacer, que aprender o no aprender, en quien apoyarte o confiar, y por supuesto el responsable único de todas las consecuencias que cada uno de tus movimientos por pequeños que sean, conllevan. Está claro que es más cómodo poner la responsabilidad de tus problemas en algo externo a ti, pero esto es un callejón sin salida. En realidad esta auto-responsabilidad absoluta y completa es la base de tu libertad, eres más libre en la medida que eres más responsable de tu vida. Será normal que te equivoques bastantes veces y asumas esas consecuencias pues será muy beneficioso en tu aprendizaje continuado.

Comprende y graba bien en tu inconsciente que no pasa nada si te equivocas. Bueno claro que pasa, que da rabia, fastidia tenerlo que repetir, no quedar genial, etc. pero no pasa nada importante. No hay nada malo en equivocarse, es un  proceso natural del ser humano, pues sino serías más perfecto que una máquina, aunque también ellas fallan, tendrías que ser un dios como mínimo para no  fallar jamás. Hay errores más o menos agobiantes, pero te responsabilizas de  ellos hasta sus últimas consecuencias y ya está, no dejan de ser errores,  humanos, errar, normal. Se trata de que asumas que no has fracasado, que no eres un inútil, un ser inferior, que eres normal, y en realidad todo lo que sabes lo has ido aprendiendo a través de un proceso de ensayo-error que es el modelo natural de aprendizaje que te lleva al ensayo-acierto. Por cierto, también ese es el modelo experimental  básico en la Ciencia. Es un juego, no un juicio final. Si te equivocaste de trabajo busca otro, de pareja pues te separas, si hiciste algo mal con tu hijo, vecino, amigo, padre, en cuanto te des cuenta lo reconoces sin más pamplinas y lo arreglas y si hace falta pedir perdón verás que a gusto te quedas. Sin tanto drama. Nos hemos vuelto excesivamente dramáticos. Las cosas tienen la importancia que se las quiera dar. Todas estas cosas son lo más normal del mundo, pero no se sabe porque lo convertimos en algo vergonzoso y o imperdonable.  ¿De verdad es tal fracaso o tan grave o en realidad deberíamos hacer una fiesta para celebrar todo lo que hemos aprendido?

Todo esto independientemente de la reacción de los demás, tú te haces cargo de ti mismo, nada más, y cada uno de lo suyo. Por cierto, si no te perdonan o ya te odian para siempre eso forma parte de ellos,de sus decisiones, criterios, aciertos o errores, pero a ti a partir de ahí, el asunto  ya no te concierne. Eres falible y eficaz, humano tu, libre de cambiar de opinión, de trabajo, de religión y de lo que quieras cuantas veces quieras. Lo haces para mejor, o eso crees en ese momento y es lo que cuenta. Y si luego decides volver para atrás, pues vuelves, sabiendo que nunca has perdido el tiempo, pues necesitabas ese ir adelante y  atrás para aprender o entender algo.

Se muy consciente de que la verdad es que nadie va a juzgarte. Si tu eres en este mundo el mayor especialista en ti mismo, el que mas sabe de ti, es absolutamente absurdo pensar que cualquier otro ser humano que no seas tú este capacitado  para juzgarte. Tendría que ser un ser superior a todos los demás humanos, en todos los aspectos para poder ser juez de alguien, y me parece que alguien así no existe. Que lo hagan, que la gente te juzgue, opine sobre ti, te condene, te idolatre, es otra historia, cada uno puede hacer lo que quiera, pero el hecho es que en realidad su juicio no tiene absolutamente ningún valor de ningún tipo, es solo una opinión particular, un concepto personal. No es nada importante ni definitivo en tu vida, ni puede tener peso alguno sobre tus decisiones y tus actos, a no ser que tú decidas dárselo considerando que tu  vida debe ser regida por lo que los otros te digan, por supuesto que puedes hacerlo así si lo deseas y si tan poco confías en ti y tanto en los demás no pasa nada, sigue siendo tu decisión, pero ya sabes, habrás de responsabilizarte de ella, y si sale mal, el responsable sigues siendo tú que elegiste fiarte, obedecer o dejarte llevar, recuerda que es inútil que trates de culpar a nadie, decidieron por ti sin obligarte, fuiste tú el que les dejaste, el que tomaste la decisión de seguir su criterio y no el tuyo.

Tú eres tu único juez, solo tú sabes qué y por qué has hecho lo hecho y si no te gusta lo arreglas y lo cambias, y si sí te gusta ,independientemente de que tengas a todos en tu contra, pues tú verás. Cuando Coopérnico dijo que la tierra era redonda y no plana, fue el ser más odiado del planeta, pero ni siquiera un gran número de personas en tu contra ha de ser el   argumento que te haga cambiar tu opinión.

Si alguien te juzga es ese alguien quien tiene un problema: el de meterse donde no le llaman, o el de creerse más que los demás,o el de creer que su opinión le importa a alguien o el de buscarse ese tipo de  distracciones para no mirarse a si mismo. Lo que debería hacer es ?mirarse el ombligo?, pero eso no eres tú quien ha de hacérselo ver, tu bastante tienes con lo tuyo como para ir por ahí dando lecciones no pedidas, tendrán que aprenderlo  por si mismos, así funciona.

Te juzguen para bien o para mal, todo sigue igual, solo tú tienes el poder de hacerles caso. Ya está. Eso es todo. Te han juzgado  pues están muy convencidos de que es su obligación y su derecho. ¿Y? ¿Piensas vivir agobiado pensando en esos poderosos seres juiciosos y sus juiciosos juicios? Aprendiste a  preocuparte en exceso con este asunto de la opinión de los demás y ahora tú puedes, si así lo  deseas, situarlo en su valor real para tu vida: cero. Si tus compañeros creen que eres bobo, tu pareja te subestima, o tu padre no te valora, etc. recuerda que es su problema, su criterio, su responsabilidad. Y la tuya es darle al asunto la importancia que TÚ DECIDAS pues ninguna otra es real para ti. Puedes también utilizarlo como autocrítica constructiva, para tomar nota de datos objetivos sobre ti que quizás te cuesta ver, pero para bien, nunca para fustigarte, para retarte a ti mismo y tratar de mejorarte y superarte porque a  ti te apetece hacerlo.  Si decides que ellos tienen razón, que eres lo peor y que esto es el fin del mundo y motivo paraf irmar tu eterna desdicha por tus carencias y defectos, así será, no pasa nada, vivirás sufriente porque tu quieres. Si decides que sería precioso que la gente te viera de otra manera pero que esto es lo que hay, y que vas a soltar la piedra en vez de llevarla para siempre en la mochila, así será. En cualquier caso es tu decisión, y por el hecho de ser tuya, personal, está bien. Nadie puede obligarte a estar mejor si tú no quieres, pueden desearlo pero no tienen derecho a imponerte tampoco el bienestar. En realidad nadie te va a juzgar, que lo hagan continuamente es irreal para ti y si decides que no te va a afectar, será sólo un concepto, una idea, se la llevará el viento.

Ya que tú eres tu único juez, júzgate con calma y magnanimidad, arregla lo que esté mal, felicítate por lo que esté bien y sigue siendo el aprendiz de sabio que en realidad eres. Déjate ya de culpas, durezas y castigos. Ya no estamos en la Edad Media. Si consigues ir controlando el miedo al rechazo por tus errores cometidos y que seguirás cometiendo mientras vivas pues así es tu condición de humano, tus auto-juicios serán tu guía serena,genial y genuina y tus errores tus mejores maestros.

Se consciente que no tienes nada que demostrar a nadie. Excepto a ti mismo. ¿Te imaginas que agobio que siendo ya mayor descubras que has estado toda tu vida haciendo algo que no quieres solo por demostrarle a ?alguien? que eras capaz de hacerlo? Es tu vida, es sólo una, haz lo que quieras y verás como sin saber cómo lo hiciste, todo habrá salido bien, habrá algunos más orgullosos de ti de lo que jamás imaginaste, y todo por haber vivido con autenticidad y valentía respecto a ti mismo y a lo que entendiste que tu vida debía ser y no para encontrar desesperadamente aprobación y apoyo.

No des a nadie más poder sobre tu vida y tus decisiones que el que te das a ti mismo. Acostúmbrate a confiar en ti más que en nadie, por muy superior en edad, conocimientos o experiencias que sean los demás, a la hora de tomar las decisiones. Puedes dejarte aconsejar,i nformar, animar o lo contrario, pero después, estás solo contigo mismo. Recuerda que solo tú sabes lo que deseas y lo que necesitas en cada momento, y que  eres el que más probabilidades tiene de acertar.

Procura observar que no haya nadie en tu vida en quien descansa tu felicidad, tu sensación de estar completo, que no hayas puesto en  nadie  tu paz y tu poder más que en ti mismo. Si consigues ir dando cada vez menos importancia al dolor que se siente cuando las personas en las que te solías apoyar ya no son tu clon, y ya no coinciden contigo en todo, asumiendo que si ocurriera así seríais una sola persona y no dos, irás siendo cada vez más fuerte. Ese dolor es momentáneo, esa sensación de vacio es necesaria. Si asumieras todos sus consejos acabarías viviendo su vida y no la tuya. Si te faltara esa persona tu vida dejaría de tener sentido. A veces más que amor, este poner a alguien por delante de tu propia vida, no es más que una forma de cobardía para no hacerte cargo al cien por cien de ti mismo. Recuerda que has de responsabilizarte de todos y cada uno de los errores que cometas y que saberlo te ayuda a estar alerta para cometer los menos o menos gordos posibles.

Salte del modelo de competencia. Este modeloque inicialmente se implantó a nivel empresarial, saltó luego sin que se sepa muy  bien cómo, a formar parte de todos los ámbitos de la vida y ahora nos tiene condicionados a muchos  niveles haciéndonos vivir pendientes de los demás y en continuo proceso de comparación. Date cuenta de cómo a la sociedad se le ha ido de las manos y tu pagas la factura. Tus hijos han de sacar mejores notas en el cole que otros para que tu te sientas bien, has de ser mas delgado, bello y rico que los otros, más listo, tienes que tener casa,  coche o las cosas que todo el mundo tiene y a ser posible mejores y esto se ha convertido en la ley social que si  no logras te hará sentir inferior. Los muy competitivos lo logran pero a base de no vivir y los no competitivos ni lo intentan sintiéndose fracasados por antelación. El caso es que ?ganar? en todas las áreas de la vida es absolutamente irrealizable y es la base de una gran cantidad de malestar psicológico individual. Siempre habrá niños más listos que los tuyos, gente más guapa y más rica que tú y si te pasas el día comparándote, has encontrado la perfecta manera de ser un desgraciado perdedor. La comparación  que solemos practicar es siempre la de compararnos con los que están mejor pues si te fijas nunca te comparas con el de abajo pues eso no tiene sentido. A sufrir pues. Además nunca llegarás, ya que por mucho que mejores siempre habrá alguien mejor. Tiene su parte de muy absurdo pues si cada uno es diferente, si cada persona es un ser humano único e irrepetible que jamás hasta ahora ha existido ni volverá a existir sobre la faz de esta tierra, solo se podría comparar consigo mismo. De otra manera siempre estarás comparando sandias con melones.

Salte. Si te comparas hazlo con ambos extremos, para ser consciente que estás mejor que unos y peor que otros, así el proceso de lacomparación sería un poquito menos absurdo. La competencia lo suyo es hacerlo con uno mismo. Ser consciente de tus fortalezas y no parar de desarrollarlas, y ser consciente de tus puntos flacos y tratar de irlos mejorando. Ahí si que puedes llegar lejos, lejísimos. Y nunca pierdes. Buena motivación. En realidad, las personas que han triunfado, las empresas que se han hecho millonarias, lo han hecho por sus diferencias, por hacer algo distinto y original, no por ?borreguear? ni por auto-deprimirse y o auto-fustigarse. Han explotado sus diferencias, su individualidad. COMPITE SOLAMENTE CONTIGO MISMO, disfruta de tus fortalezas y mejora tus debilidades. Reconoce tu individualidad e irrepetibilidad  y explota tus diferencias. Observa y corta en cada ocasión en que los pilles, todos los procesos de este calibre que salen de tu mente ante determinadas situaciones y que te acaban llevando a la desmotivación y la desilusión.

A. Jechimer. 2009

ARTÍCULO 2:

LAS 25 PREGUNTAS PARA EVALUAR TU CAPACIDAD DE AUTOGESTION DE TU FELICIDAD

1. ¿Crees que piensas por ti mismo? (Capítulo 1)
2. ¿Eres capaz de controlar tus sentimientos? (Capítulo 2)
3. ¿Tus motivaciones son interiores o exteriores? (Capítulo 7)
4. ¿Te has liberado de la necesidad de aprobación? (Capítulo 3)
5. ¿Eres tú quien establece tus propias reglas de conducta? (Capítulo 7)
6. ¿Te has liberado de tu necesidad de justicia y equidad? (Capítulo 8)
7. ¿Puedes aceptarte tal como eres y evitar los reproches? (Capítulo 2)
8. ¿Estás libre de la necesidad del «culto al héroe»? (Capítulo 8)
9. ¿Eres un hacedor o un crítico ? (Capítulo 9)
10. ¿Te atrae lo misterioso y lo desconocido? (Capítulo 5)
11. ¿Puedes evitar describirte a ti mismo empleando términos absolutos? (Capítulo 4)
12. ¿Puedes quererte a ti mismo todo el tiempo? (Capítulo 10)
13. ¿Puedes tomarte tu propio descanso? (Capítulo 10)
14. ¿Has eliminado todas las relaciones de dependencia? (Capítulo 10)
15. ¿Has eliminado de tu vida las acusaciones e imputaciones? (Capítulo 7)
16. Has logrado dejar de sentirte culpable? (Capítulo 5)
17. ¿Eres capaz de evitar preocuparte por el futuro ? (Capítulo V)
18. ¿Puedes dar y recibir amor? (Capítulo 2)
19. ¿Puedes evitar la ira paralizante en tu vida? (Capítulo 11 )
20. ¿Has eliminado las tácticas postergatorias como estilo de vida? (Capítulo 9)
21. ¿Has aprendido a fracasar eficientemente? (Capítulo 6)
22. ¿Puedes gozar y disfrutar de algo espontáneamente? (Capítulo 6)
23. ¿Puedes apreciar el humor y crearlo? (Capítulo 1)
24. ¿Te tratan los demás como quisieras que te traten? (Capítulo 10)
25. ¿Estás motivado por tu potencial de crecimiento y desarrollo o por la de reparar tus deficiencias? De W. Dyer. Tus zonas erróneas

One Comment

Deja un comentario
  1. Jose / Abr 21 2011 22:21

    oralee me quede anonadado al leer estas lineas la verdad esque si es sierto en todo lo que se menciona y que pena que dejemos pasar nuestra vida, cada momento que tenemos de vida en estar preocupandonos por lo que piensan los demas de uno o por ser mejor que los demas como bien lo mencionan aqui arriba todos somos humanos y es de humanos errar, ojala pronto todos tomemos la determinacion de dejar de compararnos con los demas y sobre todo aque nos hagamos responsables de nuestra vida propia y nuestras decisiones por que siempre seran nuestras decisiones y no la de los demas ….

Deja un comentario